Ayer, mientras sentía como el avión tomaba tierra y mi cuerpo notaba el pequeño encontronazo del tren de aterrizaje contra el asfalto de la pista, también, y en el mismo instante, mi ser se hizo eco de la vuelta a la realidad. Han sido dos días y medio de charlas interesantes, risas, abrazos, debates, besos, largos paseos, intercambio de opiniones, información, de búsqueda de fórmulas innovadoras para defender lo que sentimos como nuestro, encuentros y reencuentros, inicios de amistades y consolidación de las ya existentes para que perduren en el tiempo. Nuevas experiencias que enriquecen el conocimiento, descargan peso del alma y proporcionan la motivación necesaria para seguir trabajando duro un año más.
Quiero dar las gracias a todos los responsables de tal despliegue Eva y Christer de Heartmaker y José de la Rosa de La Máquina China por hacer realidad un sueño tan bonito, también a los colaboradores y patrocinadores por hacerlo posible para todos nosotros. Mandar un cariñoso saludo a todas/os las/os que conocí allí y a las/los que ya conocía. Un beso a los hombres y mujeres con los que compartí palabras, ilusiones y logros. Un abrazo enorme a las casi noventa personas que asistieron.
Las II Jornadas de Novela Romántica en Sevilla ya han tocado a su fin, amenazando con una tercera para el año próximo. No faltéis, únicamente todos juntos lograremos que la romántica sea tratada del modo que merece; como cualquier otra literatura, ni más ni, por supuesto, menos.
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